Cinco detenidos en Palma por la muerte de un trabajador que se cayó desde una altura de unos siete metros mientras trabajaba en el techo de la piscina municipal de Son Roca, en Palma. En un momento se pensó que no había ningún implicado en el fallecimiento del hombre, pero durante la investigación la Policía Nacional se percató que la escena del crimen había sido manipulada. Los detenidos se encuentran en libertad condicional con cargos y están pendientes de juicio.
Todo empezó el 1 de julio del año pasado cuando se desprendió el falso techo de la cubierta de la piscina municipal de Son Roca. No hubo consecuencias para ningún usuario, pero el Institut Municipal de l’Esport del Ajuntament de Palma (IME), informó sobre el cierre provisional de las instalaciones «con el fin de evitar nuevos incidentes».
El trágico suceso ocurrió el 5 de agosto del 2019. Un obrero cubano de 54 años estaba subido a un andamio sin anclar de unos siete metros de altura cuando éste se desplomó, provocándole graves lesiones. Supuestamente, el trabajador que le acompañaba llamó a los servicios de emergencia para avisar de lo ocurrido. El herido fue trasladado al hospital de Son Espases, donde falleció. El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y al llegar a las instalaciones se dio cuenta de que la escena había sido alterada. Los agentes comprobaron como el andamio no reunía las mínimas condiciones de seguridad y que presentaba deficiencias en los frenos de algunas ruedas. También descubrieron que cuando el fallecido se desplomó se encontraba con otros dos trabajadores de origen pakistaní que no tenían contrato laboral. Cuando éstos presenciaron el accidente llamaron a su jefe para informar de lo ocurrido y después se fueron. El encargado avisó a los servicios de emergencia y supuestamente manipuló el lugar.
Los dos trabajadores fueron detenidos por un delito de omisión del deber de socorro y el jefe de éstos, administrador de la empresa subcontratada, como presunto autor de un delito de homicidio imprudente y otro contra los derechos de los trabajadores. Asimismo, se detuvo a la administradora de la compañía adjudicataria por homicidio imprudente, ya que supuestamente entregó el andamio que se desplomó. Por último, la Policía detuvo a un quinto trabajador por falsedad en la documentación de Prevención de Riesgos Laborales.
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